El Gobierno de Venezuela anunció el cierre de sus embajadas en Noruega y Australia, una medida que coincide con la reciente entrega del Premio Nobel de la Paz a la opositora María Corina Machado. La medida forma parte —según Caracas— de una “reestructuración del Servicio Exterior” para fortalecer alianzas estratégicas.
La vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores de Noruega, Cecilie Roang, confirmó el cierre y aseguró que la embajada venezolana no ofreció explicación alguna. “Pese a nuestras divergencias, Noruega desea mantener el diálogo con Venezuela”, expresó, lamentando la decisión. Roang también recordó que el Comité Noruego del Nobel actúa de manera totalmente independiente del gobierno.
La entrega del Nobel a Machado, de 58 años, ha generado controversia dentro del chavismo. El Comité justificó el galardón por su “defensa de los derechos democráticos del pueblo venezolano” y su esfuerzo por lograr una “transición justa y pacífica hacia la democracia”. Maduro, visiblemente molesto, la calificó de “bruja demoníaca”, mientras la opositora dedicó el reconocimiento al “pueblo sufriente” y agradeció el respaldo internacional.
Caracas aseguró que los servicios consulares en Noruega y Australia continuarán operando a través de “Misiones Diplomáticas Concurrentes”, cuyos detalles se divulgarán próximamente. El Gobierno argumentó que esta medida responde a la voluntad de “defender la soberanía nacional” y optimizar los recursos disponibles del Estado.
Como parte del mismo anuncio, Venezuela informó la apertura de nuevas embajadas en Zimbabue y Burkina Faso, países con los que busca fortalecer la cooperación política y económica. “Esta reorganización redefine nuestra presencia diplomática para estrechar lazos con el Sur Global”, concluyó el comunicado oficial.