El Gobierno colombiano anunció el aumento del arancel a la importación de buses eléctricos, que pasará del 0 % al 10 % a partir del 16 de diciembre. La medida busca consolidar la industria nacional de movilidad eléctrica, que ha demostrado capacidad para atender la demanda interna y competir en el mercado regional.

El Ministerio de Comercio, Industria y Turismo explicó que el país es actualmente el único en América del Sur con capacidad para ensamblar buses eléctricos biarticulados, integrando en su mayoría componentes de fabricación local. La cartera también destacó que la industria puede producir hasta 1.500 unidades anuales, y que con nuevas inversiones podría alcanzar las 3.000 unidades.

“La transición energética solo tiene sentido si se traduce en empleo y productividad. Este paso protege y amplía la capacidad industrial del país, garantizando competitividad real y trabajo calificado”, afirmó la ministra de Comercio, Diana Morales.

El sector vinculado a la movilidad eléctrica agrupa más de 300 proveedores directos e indirectos, que generan cerca de 13.000 empleos en áreas como manufactura, ingeniería y desarrollo tecnológico. Este ecosistema ha impulsado la creación de un clúster de movilidad eléctrica basado en el talento y la infraestructura nacional.

Con la nueva tarifa arancelaria, el Gobierno espera reducir la dependencia de importaciones y estimular la producción local, consolidando a Colombia como referente regional en la fabricación de buses eléctricos.