NotiNowen

Embajador en Estados Unidos, a consultas

Como medida directa ante los insultos y acusaciones de Donald Trump, el gobierno del presidente Gustavo Petro decidió llamar a consultas a su embajador en Washington, Daniel García-Peña. La movida diplomática marca un punto álgido en la crisis desatada después de que el expresidente estadounidense llamara “narcotraficante” y “lunático” a Petro.

El ministro del Interior, Armando Benedetti, calificó las declaraciones de Trump como graves e injustificadas. Sostuvo que, aunque ha habido “excesos en los trinos” del presidente Petro, nada justifica una acusación de esa magnitud, especialmente viniendo de quien ha sido vinculado con figuras de la mafia en investigaciones periodísticas.

Benedetti fue más allá y conectó la arremetida de Trump con la postura internacional de Colombia. Sugirió que el ataque es una represalia por las declaraciones de Petro sobre la soberanía nacional, la presencia militar de EE. UU. en el Caribe y, sobre todo, su firme apoyo a Palestina, una postura que, según él, “siempre se cobra políticamente”.

En un giro más severo, el ministro Benedetti alertó sobre la posibilidad de una acción militar contra Colombia, leyendo entre líneas los trinos de Trump. Aclaró que las operaciones pasadas en la frontera con Venezuela fueron exclusivamente para combatir grupos ilegales y negó rotundamente que Colombia se alinearía con Caracas contra Washington.

Internamente, Benedetti criticó con dureza a los precandidatos presidenciales que, movidos por el “odio” a Petro, celebran las sanciones y piden una invasión. Advirtió que estas posiciones son catastróficas para la economía nacional y juegan en contra de los intereses del país en un momento de máxima tensión.

Para cerrar, el ministro se refirió al impacto práctico de la crisis. Lamentó la probable interrupción de la ayuda militar estadounidense, pero argumentó que esto solo empeoraría el problema de las drogas. Benedetti explicó que el narcotráfico ha mutado: ahora opera como una “franquicia” que sirve principalmente al mercado europeo, y que cortar la ayuda solo fortalecería a los grupos criminales locales sin resolver el problema de fondo.